CAPSULAS IGNACIANAS 9


Caminar es un arte, si vamos siempre con prisas nos cansamos y no podemos llegar a nuestro destino, el destino de nuestro viaje. Sin embargo, si nos paramos y no nos movemos, tampoco llegaremos a nuestro destino. Caminar es precisamente el arte de mirar al horizonte, pensando adónde queremos ir, y hacer frente a la fatiga que nos causa el caminar. 

Además, a menudo el camino es arduo, nada fácil. "Quiero ser fiel en mi marcha, pero no es fácil. Escucha: hay oscuridad, hay días oscuros, días de fracaso, y hasta días de caer... alguien se cae". Sin embargo, tened siempre en la cabeza: no tengáis miedo al fracaso, no tengáis miedo a caer. En el arte de caminar, el caerse no es lo que importa, sino "el permanecer caído". Levantaos en seguida, de inmediato, y seguid adelante. Y esto es hermoso: trabajar todos los días, caminar humanamente. Pero también: es terrible caminar solo, terrible y tedioso. El caminar en comunidad, con amigos, con los que nos aman: esto nos ayuda, nos ayuda a llegar precisamente allá adonde teníamos que llegar.