CAPSULAS IGNACIANAS 8


"Comienza por darte. El que se da, crece. Pero no hay que darse a cualquiera, ni por cualquier motivo, sino a lo que vale verdaderamente la pena: Al pobre en la desgracia, a esa población en la miseria, a la clase explotada, a la verdad, a la justicia, a la ascensión de la humanidad, a toda causa grande, al bien común de tu nación, de tu grupo, de toda la humanidad; a Cristo, que recapitula estas causas en sí mismo.


Cada vez que me doy así, sacrificando de lo mío, olvidándome de mí, yo adquiero más valor, un ser más pleno.

Mirar en grande, querer en grande, pensar en grande, realizar en grande".

San Alberto Hurtado sj